11.11.07

vapores desprendidos por la pradera

Hay libros que uno lee y que sabe o cree que nunca volverá a leer. Libros de los que vale la pena entresacar algún párrafo para compartirlo con los amigos, en lugar de garabatear unas notas en una pequeña agenda que nadie se tomará la molestia de releer dentro de unos meses. De modo que, a partir de ahora, voy a publicar en mi blog citas o fragmentos de obras que, por la razón que sea, han llegado a mis manos y me han obligado a leerlas.

Comenzaré por "Contra el lenguaje", de Andrés Viña, editado por Anagrama en 1977, libro opaco, de difícil lectura, del que destaco las siguientes líneas (p. 73), que parecen citar a su vez a Spinoza:

"Ni la consciencia, ni el pensamiento ni otros atributos (el Alma), pueden ser considerados con independencia y autonomía con respecto al Cuerpo, como tampoco al Alma se le puede atribuir soberanía sobre el Cuerpo al que pertenece. ¿Acaso no son simples atributos de éste? Pertenecen a la epidermis, son efectos superficiales, 'vapores desprendidos por la pradera' y que permanecen en contacto directo con ella."

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La mente no existiría sin el cuerpo, pero nada existiría sin la mente.

Jaume Quintanilla dijo...

De acuerdo con la cita, pero lo más interesante del libro, en mi opinión, es su consideración del lenguaje (en propiedad, de los diferentes lenguajes) como corsés del conocimiento y de la realidad. Especialmente despiadada es la descripción de los matemáticos como sumos sacerdotes de su propia religión. Lo he leído con la sana intención de dejarlo en bookcrossing, pero definitivamente se queda en mi humilde biblioteca.