26.9.06

vaya potra


Para pasmo de amigos y colegas intérpretes, que por lo general odian desplazarse a Luxemburgo para trabajar, Chen y yo fuimos a ese pequeño y plácido país y ciudad para visitar a algunos amigos el pasado fin de semana.

No hay mucho que contar, salvo que durante un paseo por los alrededores de la aldea Lorenzweiller, cuando para atajar cruzábamos un campo donde pastaba una familia de caballos (el macho, la yegua o jaca y un potro bastante crecidito), me acojoné bastante cuando los caballos decidieron acompañarnos desde muy cerca, como haría el dedo gordinflón de un niño con una hilera de hormigas. Nosotros éramos cinco adultos (entre ellos el padre de mi amigo) y tres niños, pero por suerte el caballo y la yegua no vieron amenazados su territorio ni la seguridad de su cría.

En la entrada anterior del blog encontraréis un poema ("la burca") que escribí ayer en Bruselas.

[Ilustración de Luis Quintanilla para "Los viajes de Gulliver": http://www.lqart.org/illustfold/gulliver/gultrav.html]

"la burca"


la burca

el cuerpo es interficie con el cosmos
con el mundo
con otras interficies cuerpos

entre personas ecos
desde la burca
gestos miradas palabras

en el hombre
hombre y animal
en el hombre-animal

sin la burca
piernas y pecho
piel
dedos ojos voz


Bruselas, 25.9.06

22.9.06

sufijos inexistentes


Al final volvemos a Madrid el jueves que viene, día 28, un par de días antes de lo previsto. En principio tenía que trabajar en Bruselas también el viernes 29 y regresar con Chen durante el fin de semana, pero al final me han cancelado ese último día para que pueda trabajar el viernes en Madrid.

Salvo un par de días entre la semana pasada y ésta, que cayeron algunas gotas, aquí ha hecho un tiempo estupendo, caluroso (sin pasarse) y muy soleado, todo un lujo. Anoche, por ejemplo, cenamos en una terraza en mangas de camisa.

Y no hay demasiado que contar: durante el día, yo, mucho trabajo, y Chen un montón de tiempo libre; por la tarde-noche, bastante vida social.

En la entrada del blog anterior a ésta encontraréis el poema "Límites", escrito originalmente en esperanto. Habréis observado que, a veces, en mis traducciones del esperanto al castellano, utilizo palabras nuevas, extrañas, inventadas, que responden a palabras perfectamente válidas y aceptables en la lengua original. En este caso he empleado unos sufijos inexistentes pero teóricamente posibles como formas condicionales de los sufijos "-ebla" (en castellano "-able/-ible", es decir, "que se puede") e "-inda" ("que merece la pena, digno de"). Por ello, junto a "pensebla" ("que se puede pensar, pensable") y "direbla" ("que se puede decir, decible") aparecen dos vocablos con los significados "que se podría pensar" y "que se podría decir" (o, como audazmente propuso Ana el otro día en una taberna bruselense, "*pensariable" y "*diriable"). Espero que así imaginéis mejor por donde iban los tiros.

19.9.06

"Límites"


Limoj

Ne ĉio pensubla penseblas.
Ne ĉio dirubla direblas.
Ne ĉio dirunda dirindas.

La mondoj imageblaj malpli vastas
ol tiuj imagublaj.

Lingvoj.
Limboj.
Limoj.

[Bruselas, 17.9.2006]

["Límites": No todo lo que podría pensarse se puede pensar. / No todo lo que podría decirse se puede decir. / No todo lo que valdría la pena decir vale la pena decirlo. // Los mundos imaginables son menores / que aquéllos que cabría imaginar. // Lenguas. / Limbos. / Límites.]

15.9.06

"El viejecito"

El viejecito

La postura del loto
requiere no menos esfuerzo
que la de un mesías en la cruz
o un profeta a lomos de una mula.

Quienes practiquéis el zen:
dejadlo y poneos en pie
como este viejecito de aspecto dormido
en cuya frente serena se lee con letra diminuta
el libro del tao.


Bruselas, 11.9.2006

7.9.06

de Madrid al cielo (y a la inversa)

Hemos vuelto a Madrid el martes por la noche y, como comprenderéis, estamos cansados después del viaje. Entre ayer y hoy hemos dedicado las mañanas a trámites de extranjería, y parte del resto del día a vida social. Desde el domingo 10 hasta el sábado 30 estaremos en Bruselas, así que casi no nos da tiempo a poco más que deshacer maletas para hacerlas de nuevo.

En Taiwán leí Soldados de Salamina, de Javier Cercas. El tema, el argumento de esta novela no ficticia son muy interesantes. No sé hasta qué punto la ha ficcionalizado el autor, como hace sospechar por ejemplo el personaje de su novia, pero no importa: a pesar de algunos trucos baratos de escritor profesional (sobre todo en la parte final del libro) y de ciertos ecos macondianos que no venían demasiado a cuento, os la recomiendo como lectura, aunque sólo sea para refrescar el recuerdo que se merecen la canalla franquista y fascista (y quienes siguen defendiendo su legado en la actualidad) y el de los que se enfrentaron a ella (y perdieron).

Os dejo con mis últimos poemas, escritos entre Pingtung y Madrid del 10 de agosto al 6 de septiembre, para que podáis despacharos a gusto con ellos.



Knabino

Perturba belo
faros vin fama. Same
pro tur’ Babelo.



[Muchacha: La belleza perturbadora / te hará famosa. Igual / Babel por una torre.]




Precisiones a “Sin fecha”

La redonda, perfecta letra o
que concibiera un fenicio ingenioso
fue una vez el dibujo de un ojo
(con sus dos jeroglíficos
la propia palabra ojo
nos sigue mirando).

Probablemente
todo venga de algo
y nada de nada.

La cópula de dos mariposas
al norte de Madrid
podría inspirarla
el roce o el tango entre dos tifones,
o el vals de dos galaxias.

Por lo demás,
caerán imperios, pero no necesariamente
sucederá Shangri-La.
(En Moscú, en lugar de zares rojos,
ahora un césar negro como el crudo.)

Defendamos las pequeñas libertades,
los pequeños logros.

No faltarán generales mediocres
dispuestos a traicionar a la República.




Vidpunktoj

Notu bone, junuloj: vi ne estas la futuro.

Elaston, energion kaj miraĝojn jun-aĝajn
mi konas, spertis aŭ, almenaŭ, memoras,
sed la sola futuro nomiĝas maljun’.

Ne trompu vin, junuloj: la paseo vi estas.

Via futuro? Jen mi!



[Puntos de vista: Prestad atención, jóvenes: vosotros no sois el futuro. // La elasticidad, energía y espejismos juveniles / los conozco, experimenté o, al menos, los recuerdo, / pero el único futuro se llama vejez. // Jóvenes, no os engañéis: vosotros sois el pasado. // ¿Vuestro futuro? ¡Lo soy yo!]




Contradicciones

Son tiempos de guerra.
Sólo quien ya tenga derechos tiene derecho a derechos.
Ya no es fácil sobrevolar la pirámides en helicóptero al atardecer.

Con chanclas no se puede salir corriendo.
Sin chanclas caminar no vale la pena.

Uno puede sentirse a gusto en cualquier sitio.